«El nuevo diseño de las etiquetas tiene una clasificación más clara para el frenado, la resistencia de la rodadura y el nivel de ruido de los neumáticos. Se podrá acceder a los nuevos datos de las etiquetas a través de un código QR presente en cada uno de los neumáticos y contarán con nuevos pictogramas para los diferentes modelos de neumáticos de invierno.
A partir de mayo de 2021 entrará en vigor en la Unión Europea un nuevo etiquetado de neumáticos con el que se ofrecerá a los consumidores información más completa sobre las características de los neumáticos, según nos recuerda Continental.
En estas nuevas etiquetas, se han reestructurado los apartados de la resistencia de la rodadura y de comportamiento de frenado en carreteras mojadas, mientras que los niveles de ruido ahora se indican a través del número de decibelios y utilizando las letras A, B o C.
Los usuarios podrán acceder a información adicional del neumático que hayan comprado a través de un código QR presente en las etiquetas que los llevará a una base de datos de la Unión Europea. Otra de las nuevas funciones consiste en dos pictogramas que indican si se trata de un neumático con adherencia para conducir con nieve que cumpla con las normas de homologación de la Unión Europea, también conocido como el test del copo de nieve, y/o si se trata de un neumático que ofrece una buena tracción en hielo en línea con los nuevos estándares de calidad ISO. Desde mayo de 2021, la nueva información de las etiquetas de la Unión Europea deberá estar disponible también para los neumáticos de los vehículos industriales (Clase C3).
En este nuevo etiquetado, las clases A y C no han sufrido ningún cambio. En cambio, para los neumáticos C1 y C2 para coches y furgonetas, respectivamente, aquellos que habían sido calificados anteriormente como clase E por su resistencia en la rodadura y su agarre en mojado serán ahora clasificados como clase D. Por otro lado, los que estaban en las clases F y G ahora serán asignados a la clase E. Con todo ello, se consigue que las etiquetas sean más claras y fáciles de interpretar.
Código QR
Los consumidores pueden descargar más información de cada neumático a través de un código QR presente en la esquina derecha de la etiqueta del neumático. Este código QR ofrece un link a la base de datos EPREL (siglas en inglés para la base de datos de productos europeos para el etiquetado energético), que contiene toda la información del producto comprado. En esta base de datos se muestran las diferentes clasificaciones para los neumáticos, así como todo el proceso productivo del modelo que se esté buscando.
Todas las hojas de información del producto son introducidas en la base de datos EPREL de forma individual por los propios fabricantes de los neumáticos, así como la clasificación de los modelos.
El nuevo etiquetado para neumáticos de la Unión Europea está diseñado para ayudar a los consumidores a escoger los neumáticos más eficientes, a la vez que se obtiene más información sobre las distancias de frenado. Tanto para usuarios finales como para los operadores comerciales escoger unos neumáticos con una menor resistencia a la rodadura puede suponer un ahorro sustancial en términos de coste de combustible, así como una reducción de las emisiones de CO2.
Una información más clara sobre sobre el agarre en mojado contribuirá a una mayor seguridad vial, mientras que la información sobre el ruido está concebida para reducir la contaminación acústica generada por el tráfico.»
Con el correcto mantenimiento de tus neumáticos podrás evitar estas situaciones, pero es verdad que no se puede prever todo y que pinchar en carretera mientras estás conduciendo puede pasar. A pesar de que no es un momento agradable, por la tensión que se sufre y la peligrosidad de sufrir un aparatoso accidente, hay una serie de trucos y consejos que puedes seguir para reducir el riesgo y salir ileso de un pinchazo en la autovía.
Lo primero que tienes que hacer si oyes que revienta la rueda o notas que uno de los neumáticos se está desinflando, es mantener la calma. Controla los nervios y no hagas movimientos bruscos. Si tu primer acto reflejo es frenar en seco, ¡evítalo! Solo empeorarás las cosas. Lo mejor es ir reduciendo la velocidad lentamente hasta que puedas parar. Utiliza las luces de emergencia para ser más visible y avisar a los demás conductores de que algo no va bien.
Si pinchas en medio de una carretera, autovía o autopista, recuerda parar lo más pegado posible al arcén y colocar los triángulos de señalización delante y detrás del coche para que puedan verte. Echa el freno de mano antes de salir de tu vehículo (los nervios son muy traicioneros) y ponte el chaleco reflectante para evitar accidentes.
En caso de que tengas dudas sobre cómo salir del coche, lo primero es conseguir libertad de movimientos, después, tratar de abrir las puertas y, solo en caso de que estén bloqueadas, protégete manos, brazos y rostro para golpear la luna trasera o las ventanillas ya que, aunque son de cristal templado (que es más resistente) conseguirás abrir una vía de escape.
Cómo reparar la rueda
Una vez que hayas tomado todas las precauciones, hayas conseguido estacionar el coche y hayas bajado de tu vehículo sin peligro, queda pensar qué hacer para poder continuar tu viaje con tranquilidad.
Si el pinchazo es reparable y dispones de un kit para repararlo, ponte manos a la obra. Recuerda que en cuanto puedas visitar un taller deberás ir a cambiar la rueda por una nueva, pero para terminar tu viaje te servirá. Si no es reparable pero tu coche tiene rueda de recambio (y sabes cambiarla), también podrás continuar tu camino.
Si por el contrario no dispones de ninguno de estos equipos o no eres muy mecánico, tranquilo. Llama a la grúa, a tu seguro o a asistencia en carretera y espera dentro de tu vehículo a que vengan a repararte el neumático estropeado.